Categoría: "Rhythm and blues"
The Allman Brothers Band "At Fillmore East" (1971)
Cuando allá por el 76, después de haber leído sobre ellos en varias revistas musicales, cayó en mis manos el álbum en directo "At Fillmore East", solo pude decir, ¿cómo he podido pasarme siete años sin escuchar a esta gente? Escucharlos por primera vez fue una experiencia fantástica, me encantó ese rollo blusero, jazzy y country que rezuma en el disco. Luego pude conocer "Brothers and Sisters", también fantástico, y luego alguno más. Más tarde pasarían por diferentes periodos de crisis y ya les perdí la pista. Aunque siguieron publicando buenos álbumes.
All Right Now (1970)
Sigo desempolvando discos. Junto al disco de The Faces, tenía el de Free, seguramente por eso del orden alfabético, en el que más o menos, se encuentran mis discos. Elegir una canción en este caso es sencillo, ya que Free fue un grupo de corto recorrido y poco conocido actualmente. Su canción más famosa, creo que está en la boca de todas o casi todas las personas de mi generación, y no puede ser otra que All Right Now.
All Right Now, una gran canción con un riff que algunos no olvidamos, junto con un solo de guitarra en el medio de la canción, nos acompañó en numerables ocasiones en aquellos primeros 70, y por supuesto la Laboral de Cheste fue el lugar en el que muchos descubrimos esta canción a través de las megafonías de nuestros colegios.
La historia de la canción, a la que probablemente éramos ajenos en aquella época (no solíamos disponer de las letras originales y nuestro nivel de inglés era escaso para comprender adecuadamente lo que se cantaba), es una de esas típicas historias de rock que hablan de sexo, en este caso con una chica (probablemente una prostituta) que se encuentra en la calle y con la que se genera una interpretación confusa entre amor y sexo, de ahí el estribillo de la canción.
Too Much Woman 1970
Desempolvando discos del baúl de los recuerdos. Rock fuerte y potente, como el de antes, como el de siempre.
Me apetecía mucho escuchar cosas antiguas, de las que hace mucho tiempo no escuchaba y tengo casi olvidadas. Buscando en el baúl de los recuerdos (ese conjunto de discos antiguos, cubiertos de polvo, que compré en mercadillos, rebajas y baratillos, cuando ya tuve algo de dinero) me apareció nada más y nada menos que un disco de The Faces. Un disco con pinta de añejo, de esos que dices "seguro que es total".
Quizás poca gente conozca a esta banda. Pero resulta que en ella estuvo gente de lo más granada: Rod Stewart, el Rolling Stone Ron Wood y el Who Kenney Jones. Su disolución, tras la salida de Rod Stewart, hizo que probablemente The Faces fuera menos conocida y famosa, que otras bandas del mismo nivel. Sin embargo, mantuvo un excelente nivel musical, despachando sin ningún tipo de complejo piezas de blues o R&B, folk, o lo que fuera menester.
He seleccionado Too Much Woman, una canción descarada, con un sonido potente y un buen rollo de rock de viejo cuño.
Why I Sing The Blues (1974)
Hace unos días hablaba con algunos de mis alumnos, entre otras cosas, de gustos musicales. Me sorprendió que tubieran gusto por los clásicos (swing, jazz, blues) Así que cuando terminamos la conversación me vino a la mente B.B. King
B.B King es uno de esos autores intemporales, de los que da igual el momento en que los hayas conocido, de los que no importan si están de moda y concuerdan con los gustos del momento. B.B King es el Rey, y cuando lo descubres te engancha de tal forma que no lo podrás olvidar en tu vida.
Land of a Thousand Dances 1966
Esta canción creo que es sin duda la canción que mejor puede representar mis años en Salamanca. Cuando hace unos días mi amigo Constan creó un grupo de whatsapp de la pandilla de la época, La Tierra de las mil danzas me vino a la mente de forma automática.
La canción es antigua, creo que la versión original es del año 1963 y la versión de Wilson Pickett de 1966, pero esta canción es un cúmulo de recuerdos de mi vida universitaria en Salamanca. Land of a Thousand Dances me suena a cerrar el Pub Santa Bárbara durante muchas madrugadas, me sabe a cerveza Voll-Damm, me huele a camarería y mucha complicidad entre amigos y me visualiza grandes recuerdos.
Va por ellos, por la panda de La bodeguilla