La música de mi vida

Corría el año 77 y mientras nosotros estábamos emocionados con aquello de la Transición y el fin de la dictadura. El el mundo, incluido España, mucha gente lo estaba pasando mal fruto de la crisis económica. Huelgas, paro y miseria. Entonces aparecieron por Londres estos jóvenes de suburbio, mal vestidos y con pinta de impresentables, hablando de que no hay futuro. ¡Qué jodidos!, cómo sabían que vendría la Thatcher y el Reagan. Neoliberalismo al poder, que el Estado es un problema. Pero "no te preocupes por tonterías", porque ahí estaban los Sex Pistols.

Por aquel entonces yo no había oído hablar del punk y mucho menos de los Sex Pistols. Yo seguía a lo mío: las buenas bandas de finales del 60 y primeros de los 70, el naciente rock andaluz y lo que dio en llamar rock urbano español.

No deja de ser curioso que conocí el punk rock y a los Sex Pistols gracias a mi profesor de Historia de la Filosofía Medieval, un dominico de pro que decía aquello de "Santo Tomás hoy no sería tomista". El caso es que dicho profesor comentó un día en clase, que los jóvenes de los suburbios y de las clases trabajadores se habían convertido al punk y eran fans de los Sex Pistols y los Ramones. Ahí comenzó la cosa, me picó el gusanillo y me puse a buscar sus discos y a escucharlos. No fue una tarea fácil, entonces no teníamos ni Youtube ni Spotify.

Lo cierto es que estos chicos, pese a que solo publicaron un disco y desaparecieron pronto, se convirtieron en la banda referencia de punk rock. Creo que dos circunstancias contribuyeron a ello: por un lado que Malcolm McLaren, su mánager, una persona que según parece decía John Lydon (Johnny RottenI) vocalista de la banda, era capaz de vender cualquier cosa y por otro lado la una parte importante de la juventud británica, incluso mundial necesitaba de alguien que fuera capaz de canalizar sus frustraciones tanto sociales, educativas o laborales y los Sex Pistols lo hicieron como nadie. Los Sex Pistols se convirtieron en ese referente que esa juventud necesitaba. Para ello se manifestaron con potentes canciones generadas por el bestial guitarreo de Steve Jones, con la voz hiriente de Johnny RottenI, un joven letrista, que más que cantar en posición de alcayata, escupía contra ese aburrido mundo de mierda en el que habían sido alojados sin pedirles permiso, con la mayoritaria composición musical del bajista Glen Matlock (músico con formación) que fue expulsado del grupo a causa de una conspiración de Malcolm McLaren, para introducir el el grupo como líder y bajista a Sid Vicious, un tío que no sabía hacer la o con un canuto y que lo más que había tocado era una pandereta, por lo que Steve Jones tubo que grabar el bajo en la mayoría de las canciones del álbum "Never Mind the Bollocks.". Finalmente no podemos olvidar la contribución del baterista Paul Cook. 

En este sentido Sex Pistols convirtieron el rock en un arma ideológica, en un elemento de lucha política al grito de "Anarchy in the U.K." en la que se manifiesta que "And I want to be an anarchist / I get pissed, destroy!)", una visión violenta de la anarquía frente a la frustración económica y alienación social. Algo parecido pasa con otro de sus himnos "God Save The Queen", que comienza: "God save the queen, The fascist regime, They made you a moron, A potential H bomb" y continúa con: "Don't be told what you want, Don't be told what you need, There's no future, No future, No future, for you", con la que según Johnny Rotten (vocalista) se pretendía defender a la clase trabajadora frente al poder monárquico. Otras canciones no dejaron de ser una fuerte crítica social como "Liar" contra la mentira y el engaño·"Lie lie lie lie you liar, You lie lie lie, tell me why, Tell me why, why d'you have to lie"; "Bodies", en la que se afronta el aborto: "Dragged on a table in a factory, Illegitimate place to be
In a packet in a lavatory, Die little baby screaming!"; el nihilismo de "Pretty Vacant": "There's no point in asking, You'll get no reply, Oh just remember I don't decide".

En este caso elegir un álbum no es nada complicado, no hay otro más que "Never Mind the Bollocks, Here's the Sex Pistols". Elegir una canción ya es más problemático. No hablaré de las más conocidas "Anarchy in the U.K." o "God Save The Queen", de esta última ya hice una publicación en este blog. Sin ningúnmotivo especiar, simplemente porque me apetece, o porque nuestro mundo está lleno de mentirosos que pretenden dirigirnos voy a escoger "Liar", como canción representativa de este álbum.

He elegido esta versión (primer vídeo), creo que de la única actuación que tienen grabada en directo. No es nada buena, pero sirve para ver el desastre que era Sid Vicious, incapaz de interpretar un acompañamiento tan básico al bajo. Luego escuchad la versión de estudio del álbum, que es interpretada por Steve Jones y que pongo en el segundo vídeo, la diferencia es notoria.